sábado, 30 de agosto de 2014

El nadador, Joakim Zander

Animada por la propuesta de Laky y por la gran campaña de marketing que Suma de Letras le ha hecho me decidí a leer El nadador, de Joakim Zander, publicitado como "el único thriller que necesitas leer este año".
Se trata de la primera novela de este autor sueco afincado en Finlandia y la revelación de la Feria de Frankfurt del pasado año tras vender sus derechos a veintisiete países.
Tras su lectura, hace ya días pero es que he estado de vacaciones y con una conexión pésima que ponía a prueba mi paciencia, debo decir que no ha sido la novela que me esperaba.




Sinopsis:

Una tórrida noche en Damasco a principios de los años ochenta. Un agente estadounidense abandona a su bebé a un destino incierto, una traición que jamás se perdonará y que será el comienzo de una huida de sí mismo. Hasta que ya no se pueda esconder de la verdad. Hasta que se vea obligado a tomar una decisión crucial.

Treinta años después, Klara Walldéen, una joven sueca que trabaja en el Parlamento Europeo de Bruselas, se ve envuelta en una trama de espionaje a nivel internacional en la que está implicado su antiguo amante y exmiembro de las fuerzas especiales del ejército sueco, Mahmoud Shammosh. De la noche a la mañana, Klara y Mahmoud se convierten en el objetivo de una cacería que se desarrolla por la Europa invernal, un mundo donde las fronteras entre países se han vuelto igual de borrosas que la línea que separa a aliado y enemigo, verdad y mentira, pasado y presente.

El nadador es una novela de intriga que habla de deudas y desagravios. De la importancia y el peso del pasado. Y de que, al final, nunca puedes escapar de la persona que eres.


Mi lectura:

La novela arranca en Damasco, en julio de 1980. En este primer capítulo el narrador nos cuenta en primera persona su historia, como agente secreto norteamericano. No conoceremos su nombre en toda la obra pero sí su periplo y su apodo, el nadador, por su afición a este deporte. Una bomba colocada bajo el coche mata a su pareja y, bajo el peso del dolor y la culpa, no ve mejor salida para salvar a su bebé que abandonarlo en la embajada sueca.
Tras un interesante arranque la acción salta al presente, cambiando a un narrador omnisciente, donde los protagonistas serán otros: Klara Walldeen, una joven sueca que trabaja en el Parlamento Europeo, huérfana, y Mahmoud Shammosh expareja de Klara, exmilitar y actualmente preparando una tesis sobre la privatización de la guerra. Ambos se verán envueltos en una frenética huida en la que se diluye la línea entre buenos y malos y quedan patentes las manipulaciones a las que estamos sometidos por parte de lobbies, gobiernos y medios de comunicación.

 Los capítulos, cortos, alternan la narración de pasado y presente de manera que, por un lado conoceremos y comprenderemos al nadador a través de su relato y, por otro, nos movemos en los agitados hechos que transforman la vida de Klara. Dos líneas que avanzan paralelas y que, como no podía ser de otra manera, confluyen en un punto que, si pretendía ser sorpresivo o descubrirse poco a poco, intuí desde muy pronto.

El nadador es una novela con un arranque lento y en la que los cambios de escenario desorientan un poco. Para que no nos despistemos del todo Zander encabeza cada capítulo con la fecha y la ubicación en la que transcurrirá, ya son varios los escenarios que recorreremos tanto en Europa como en Oriente Medio o Estados Unidos. Aún así los saltos temporales y de situación me descolocaban, sobre todo al principio de la historia. Una vez metida en ella los distintos hilos fueron más fáciles de seguir.
Si bien la historia que nos plantea puede ser creíble no así las situaciones que vivirán una joven que trabaja en el Parlamento Europeo, un abogado que trabaja para lobbies o un doctorando por mucho que el tema de su tesis verse sobre la participación de empresas y mercenarios en las guerras.
Si obviamos esto y damos crédito a la narración nos metemos en ella con facilidad ya que esta es ágil y enseguida coge ritmo, tanto que el final resulta precipitado. Además, no por esperado te deja tranquilo aunque creo que ese es el efecto que busca.

Con los personajes no terminé de conectar, no sé si por no creerme la historia o por falta de perfil. El que me pareció más interesante fue el nadador, quizá por el misterio que le rodea, del que intuimos o adivinamos más de lo que nos cuenta.

Lo que sí me ha parecido muy interesante y un tema sobre el que reflexionar es el trasfondo de la novela, la posibilidad de que la guerra no sea más que un negocio para muchos, de que estemos manipulados informativamente hablando, de que grupos de presión, grandes empresas y lobbies puedan dirigir o interferir en el voto de nuestros representantes, y que a cambio estemos en un mundo donde nuestra vida privada ya no tenga secretos para quien desee investigarla.

"Detrás de todo secreto hay otro. Detrás de toda mentira hay una más grande."

"Si os preguntáis por qué estamos tan convencidos de que tienen armas de destrucción masiva es porque nosotros se las proporcionábamos. Nosotros cosechamos lo que hemos sembrado. Tierra, sangre, mentira tras mentira."

Resumiendo, El nadador me ha parecido una novela mejorable. Si os gustan los thrillers puede ser un buen entretenimiento así como una buena manera de acercarse a los oscuros manejos de la política pero tanto la credibilidad como los personajes flojean un poco. Aún así Zander apunta maneras.


En este enlace podéis leer las primeras páginas de la novela.


Ficha técnica:

El nadador
Joakim Zander
Traductor: Pontus Sánchez Jiménez
Editorial: Suma de Letras
Páginas: 440
ISBN: 9788483656105
Fecha de publicación: 04/06/2014
Precio: 18,00 €; ebook: 8,99 €


lunes, 18 de agosto de 2014

Los niños de cristal, Kristina Ohlsson

Mi hija mayor tiene 9 años y, desde que aprendió, le encanta leer. Ahora está en una edad en la que las lecturas infantiles ya le quedan pequeñas pero aún no llega a las juveniles por temática o vocabulario. Así que no es tan fácil encontrar libros. O no lo era porque parece que las editoriales se han dado cuenta de que tenían a un sector de lectores un poco abandonado y se han puesto manos a la obra.
A esta edad ya no quiere libros de hadas y princesas (son para niñas pequeñas) o aventuras ñoñas en las que siente que la desprecian como lectora. Aún así la estructura de la historia aún no puede ser demasiado compleja y el vocabulario ha de ser asequible.
Como sé que le gustan las historias de misterio y Kristina Ohlsson es una autora que tengo entre las pendientes de este género, maté dos pájaros de un tiro y le traje de la biblioteca Los niños de cristal, su primera novela infantil. Le ha encantado y se lo ha devorado en dos tardes pero antes me lo había leído yo para comprobar que era adecuado para ella y tengo que decir que lo encontré muy recomendable para esos pequeños lectores a los que les gusta pasar un poquito de miedo y meterse en una historia de intriga que les absorba durante unas cuantas horas.



Sinopsis:

Tras la muerte de su padre, Billie, una niña de 12 años, y su madre deciden mudarse a una vieja casa en un pueblo cercano. Pero algo extraño se esconde dentro de la vivienda: ¿quién golpea su ventana en mitad de la noche? ¿por qué la lampara se balancea sin razón? ¿y quién pone aquellas figuritas de cristal encima de la mesa?
Billie sabe que algo o alguien ronda su nuevo hogar y junto a sus nuevos amigos Aladin y Simonia, se proponen descubrir la oscura historia de la casa y de quienes la habitan.


Mi lectura:

La madre de Billie piensa que necesitan un cambio. Después de la muerte de su marido cree que les vendría bien comenzar de nuevo y se mudan de la ciudad al pueblo donde ella creció. Billie no está de acuerdo. A sus doce años no quiere abandonar su piso, sus amigos, su ciudad para ir a vivir a una vieja casa. Su opinión no cuenta mucho y al poco de llegar Billie comienza a notar cosas extrañas en la casa: la lámpara del salón se balancea, algo golpea su ventana y le deja notas amenazadoras, que la hacen sentir miedo mientras está en ella. Pero no tanto como para no querer averiguar qué sucede, quién vivió antes en esa casa, qué cosas terribles ocurrieron en ella y qué es lo que provoca los extraños fenómenos.
A ello se dedicará con ayuda de sus amigos Aladdin y Simona.

Kristina Ohlsson nos trae una historia de misterio dirigida a un público infantil (mi hija me mataría si supiera que la estoy llamando público infantil) a partir de los nueve años. Debemos tener en cuenta que estas clasificaciones son orientativas y que dependiendo de la madurez psicológica y lectora del niño puede que con esa edad aún no llegue a ellas o que otro menor ya lo haga. Como padres conocemos a nuestros hijos y debemos escogerles lecturas que les motiven y les estimulen sin que supongan un reto demasiado grande y ello les haga abandonar este hábito.

En este caso la protagonista, Billie, es una niña de doce años que acaba de mudarse. No está de acuerdo con la decisión de su madre pero la acata, a regañadientes eso sí. Sus amigos Simona y Aladdin, de la misma edad, comparten las características de ser agradables y simpáticos. Son personajes con los que los niños se pueden sentir identificados.
Son despiertos e inteligentes y son hábiles buscando información por bibliotecas, museos o internet.

La trama es sencilla pero mantiene hasta el final el nivel de intriga adecuado, suficiente para mantener a estos lectores pegados a la historia pero sin llegar a límites de provocarles demasiado miedo, aunque la mía pasó un poquito hasta que despejó el misterio.

"Por las noches le costaba dormirse, y de madrugada la despertaban los pájaros que corrían por el tejado y los crujidos de las paredes y el suelo."

Está narrado en tercera persona y en pasado, lo que creo que es un acierto. Quizás si estuviera contado en primera persona o en presente los peques se implicarían más y sentirían más miedo.
La historia está dividida en capítulos cortos que hacen que la lectura no se les haga pesada en ningún momento, les mantiene en vilo, y, si quieren dejar de leer, pueden hacerlo en cualquier momento para retomarlo más tarde sin perder el hilo.

Igual de adecuado para este nivel lector me parece el vocabulario empleado y la construcción de las frases, sencillos ambos pero sin llegar a ser facilones.

Es un título que recomendaría para niños a los que les gusten las historias de misterio y también para acercar a los libros a otros a los que no les gusta leer. Seguro que querrán saber qué sucede en casa de Billie.

Por último me gustaría hacer notar la escasa diferencia de precio entre la edición en papel (13,95 €) y la electrónica (9,99 €). Creo que no compensa y al menos en papel la pueden prestar e intercambiar con amigos.

En este enlace podéis leer el primer capítulo.


Ficha técnica:

Los niños de cristal
Kristina Ohlsson
Traducción: Mónica Corral y Martin Lexell
Destino Infantil y Juvenil. Colección La Isla del Tiempo.
Fecha de publicación: 03/04/2014
192 páginas
Idioma: Español
ISBN: 978-84-08-12712-3
Precio: 13,95 €; ebook: 9,99 €


miércoles, 13 de agosto de 2014

Violetas de marzo, Philip Kerr

El mes pasado os mostraba, entre mis entradas de libros, aquellos que habían llegado a un precio fantástico grcias a las revistas del grupo RBA. Entre ellos estaba Si los muertos no resucitan, de Phiilip Kerr, que forma parte de la serie Berlin Noir. Como sabéis, y si no os lo cuento, me gusta leer las series por orden así que este título tendrá que esperar a que me lea los anteriores.
De momento he comenzado por el principio, Violetas de marzo. Poco a poco iré llegando al resto porque, os adelanto, me ha gustado el estilo de Philip Kerr y su detective Bernie Gunter.




Sinopsis:

Os transcribo la sinopsis que aparece en la contraportada del libro porque la que ofrece la editorial en su web no se ciñe exactamente a la historia.

Berlín, 1936. Bernie Gunther creía estar curado de espantos, pero ahora que ha abandonado el cuerpo de policía y se ha hecho investigador privado, el recuerdo más sórdido del Berlín de toda la vida le resulta incluso entrañable. Al menos si lo mira desde la perspectiva de la subcultura nazi, en la que cada nuevo caso parece hundirle un poco más. Violetas de marzo, eufemismo usado por los primeros nacionalsocialistas para referirse a los advenedizos, da inicio a una serie -Berlín Noir- narrada desde un punto de vista dolorosamente privilegiado, situada en momentos clave del espantoso transcurso de la Europa del siglo, que en la obra de Kerr se parece mucho a la historia universal de la humanidad.


Mi lectura:

Philip Kerr nos lleva, de la mano del detective Bernie Gunter, al Berlín de 1936. Hitler ha llegado al poder y toda la maquinaria del estado se está dirigiendo a preparar una nueva guerra. La más poderosa y peligrosa es la de la propaganda nacionalsocialista que fomenta el odio y la xenofobia.
En medio de este clima Bernie Gunter, ex-policía metido a detective privado, es contratado por un poderoso empresario del acero para investigar la muerte de su hija y yerno así como el de recuperar un collar de diamantes robado de la caja fuerte de las víctimas.
La investigación se complica por la intervención de la policía berlinesa, la Gestapo, o el mismísimo Goering.

Los Violetas de Marzo, expresión que da título a la novela, eran "los que se montan en el tren del partido y viajan en él para hacer un beneficio rápido", nuevos adeptos al nacionalsocialismo en función del beneficio económico y social que pudieran sacar de él.

El estilo de Philip Kerr es duro y construye un detective a imagen de los clásicos norteamericanos que nos narrará la historia en primera persona y en pasado. Vestido con traje y tocado con un sombrero ladeado de forma que oculta sus ojos me venía la imagen de Bogart durante su lectura. Gunter es frío y cínico, de lengua afilada e incontenible.
Las descripciones se sustituyen a menudo (quizás en exceso) por comparaciones a veces vulgares pero siempre certeras y cargadas de un humor negro y políticamente incorrecto que puede no gustar a todos.

"No era necesario ser enterrador para ver que estaba muerto. Hay formas más pulcras de limpiar las orejas a alguien que con una bala de 9 mm."

Como ex-policía sabe moverse sin exponerse demasiado y aún le quedan contactos dentro. A pesar de su pasado y quizás por él tiene tendencia a resistirse a la autoridad, más ahora que no comulga con las ideas que imperan en la autoridad.

Kerr ambienta excepcionalmente su novela en un Berlín que se prepara para celebrar los Juegos Olímpicos, en el que la capa de pintura destinada a las delegaciones extranjeras no consigue enmascarar la atmósfera prebélica. Policía berlinesa, Gestapo, SS y organizaciones mafiosas están al servicio o se sirven del partido para crecer en medio de la lucha de poder entre Himmler y Goering.
La población aún sufre restricciones consecuencia de la Primera Guerra Mundial pero la economía nacional orienta sus intereses hacia el conflicto que vendrá.

El autor describe con dureza y precisión las condiciones de vida en los campos de concentración, ya existentes y que albergaban "todo espectro de oposición a los nazis, por no hablar de aquellos contra los que los nazis eran implacablemente hostiles. Había socialistas y comunistas, sindicalistas, jueces, abogados, doctores maestros, oficiales del ejército, soldados republicanos de la guerra civil española, testigos de Jehová, francmasones, sacerdotes católicos, gitanos, judíos, espiritualistas, homosexuales, vagabundos, ladrones y asesinos. Con la excepción de algunos rusos y unos cuantos miembros de gabinete austriaco, todo el mundo en Dachau era alemán."
Es este un aspecto que no conocía y que me ha parecido muy interesante e ilustrativo. La "limpieza" interna del país y el peso como elemento disuasorio de opositores que estos campos ejercían.

La trama está bien construida y avanza a buen ritmo desde un excepcional arranque a un final que me dejó con ganas de leer la siguiente entrega.

Pero no todo iban a ser parabienes. En mi opinión el autor peca de añadir en exceso nombres y denominaciones. Los nombres de los personajes me resultaron difíciles de asimilar con tanto herr o frau lo que sea pero si además añadimos cargos policiales o militares y nombres de todas las calles por las que transita Gunter el resultado es un lío del que no es fácil salir.

Si superáis esto os encontraréis en Violetas de marzo con una buena novela negra, dura, con un protagonista muy bien construido, una trama interesante, bien documentada y ambientada en entreguerras e interesante también desde el punto de vista histórico. Personalmente, recomiendo su lectura.


Ficha técnica:

Violetas de marzo
Philip Kerr
Traducción: Isabel Merino
Tapa blanda: 320 páginas
Editor: RBA (22 de octubre de 2009)
Colección: SERIE NEGRA
Idioma: Español
ISBN: 978-8498676648
Precio: 9,95 €




lunes, 4 de agosto de 2014

Los cuerpos extraños, Lorenzo Silva

En mi última compra de libros electrónicos se vino a mi lector, entre otros títulos, Los cuerpos extraños, de Lorenzo Silva.
Después de leer toda la serie protagonizada por la pareja de guardias civiles Bevilacqua y Chamorro, no podía perderme esta última entrega, la octava ya. Y es que este par son un ejemplo de ese grupo de personajes a los que respetas y les tienes cariño.



Sinopsis:

Mientras pasa el fin de semana en familia, el brigada Bevilacqua recibe el aviso de que el cadáver de la alcaldesa de una localidad levantina, cuya desaparición había sido previamente denunciada por el marido, ha sido hallado por unos turistas en la playa. Para cuando Bevilacqua y su equipo llegan y se hacen cargo de la investigación, el juez ya ha levantado el cadáver, las primeras disposiciones están tomadas y se está preparando el funeral.
El lugar es un avispero en el que se desatan todo tipo de rumores sobre la víctima, una joven promesa que venía a romper con los modos y corruptelas de los viejos mandarines del partido y que apostaba por renovar el modo de hacer política. Además, el descubrimiento de su agitada vida sexual, que puede calificarse de todo menos insípida, arroja sobre el caso una luz perturbadora.
Pero no hay mucho tiempo para indagar y en esta ocasión Bevilacqua y Chamorro deben apresurar una hipótesis en un fuego de intereses cruzados, en el que la causa de la joven política es también la causa de la integridad personal, de la que el país entero parece haberse apeado


Mi lectura:

Después de ganar el Premio Planeta 2012, Lorenzo Silva vuelve a Destino con Los cuerpos extraños, la octava entrega de la serie Bevilacqua si contamos el libro de relatos Nadie vale más que otro, en la que la pareja protagonista tendrá que intentar esclarecer un asesinato en medio de una trama de corrupción política y urbanística ambientada en el levante español. Un tema, como todos los de la serie, muy de actualidad en el momento de la publicación.

Una llamada interrumpe la celebración del cumpleaños de la madre de Bevilacqua. En ella el comandante Rebollo le encarga la investigación de la muerte de la alcaldesa de una localidad levantina.

"- [...] Ha aparecido muerta una alcaldesa.
- Tenía que acabar pasando -opiné, arrepintiéndome casi en el acto de mi irreverente espontaneidad.
- Confío en que seas capaz de disimular tu satisfacción -me afeó- porque te va a tocar a hacer como que te interesa que se castigue al culpable."

Sin embargo, la alcaldesa asesinada es una política con una carrera intachable, que llega al ayuntamiento de su ciudad para cambiar las cosas y demostrar que otra forma de hacer política es posible por esos lares. No lo tendrá fácil. Por si el ambiente de corrupción del ayuntamiento, con mafia de por medio, no enturbiara el caso lo suficiente la alcaldesa llevaba una vida sexual a espaldas de su marido que amplía el abanico de móviles y sospechosos.

En el plano personal las vidas de nuestros protagonistas avanzan a tiempo real en cada entrega. Mientras que a Vila le conocemos una relación sentimental peculiar, con una jueza de una entrega anterior y de la que no sabíamos nada, su hijo ya es veinteañero y estudia una carrera universitaria. Por su parte, Virginia está ya cerca de la cuarentena y ninguna relación termina de cuajar.
Creo que este punto es un acierto de Silva. Los personajes van madurando con el escritor y con el lector de manera que los sentimos más cercanos, más humanos y menos simples actores de una obra.

Desde El lejano país de los estanques, primera entrega, me quedé enganchada a la serie.
Con un protagonista alejado del estereotipo de hombre alcohólico y con problemas personales típico del género, Rubén Bevilacqua ni siquiera fuma. Aunque está divorciado mantiene una relación civilizada con su ex-mujer y lo más cercana posible a su hijo. Psicólogo metido a guardia civil, escéptico por naturaleza, con un sentido del humor que me encanta, tiene en Virginia, la sargento Chamorro, a una compañera y amiga, leal, trabajadora y práctica, aunque un poco seca.
A ellos dos se han ido sumando y ganando protagonismo poco a poco algún personaje más, igual de creíbles en su normalidad.
Y si los personajes nos llegan como cercanos y nos los creemos ocurre lo mismo con los argumentos que desarrolla Lorenzo Silva en sus entregas. En todas ellas se toca un tema de actualidad en el momento de la publicación, y todas están muy bien ambientadas en el escenario elegido en cada caso.

Uno de los puntos fuertes de Lorenzo Silva son los diálogos. Y en Bevilacqua el autor tiene al interlocutor perfecto. Inteligente, agudo, irónico y rápido en la respuesta. Tampoco se queda corta Virginia y entre los dos forman un equipo perfecto.
Además de ellos Silva nos regala un montón de buenas frases y reflexiones.

" [...] No se culpe. Lo que pudo haber sido nunca importa. Por algo no fue."

A pesar de todo lo anterior Los cuerpos extraños no me pareció la mejor entrega de la serie. Quizá debido al tema de la corrupción, cuya investigación es lenta. Me dejó la sensación de que esa lentitud se transfería a la novela haciendo la trama un poco pesada.

Por lo demás es un título cuya lectura recomiendo y que disfrutarán aún más los lectores asiduos a esta pareja de guardias civiles.

En este enlace podéis leer el primer capítulo.


Ficha técnica:

Ediciones Destino
Colección: Áncora & Delfin
Volumen 1297
Fecha de publicación: 03/06/2014
352 páginas
Idioma: Español
ISBN: 978-84-233-4829-9
Presentación: Rústica con solapas
Precio: 18,50 €; electrónico: 9,99 €